Hay épocas del año como verano, navidad o en vacaciones en general en las que es habitual que nuestro organismo sufra cambios en sus hábitos cotidianos y eso derive en problemas en el sistema digestivo, como una mala digestión.
Por lo general, los síntomas habituales de la mala digestión se manifiestan a través de malestar o dolor en la parte superior del abdomen, hinchazón, ardor, acidez estomacal, diarrea o náuseas. También pueden darse otros síntomas como el reflujo ácido, eructos, gases, hipo o mal aliento.
Dichos síntomas de mala digestión pueden tener un gran abanico de causas posibles que los provocan. Determinar la causa es imprescindible para obtener el tratamiento adecuado que resuelva el problema.
Entre las causas más comunes, están las siguientes:
- Malos hábitos alimenticios
Si eres de los que saltan las comidas, o que cuando comes, te dejas ir con los irritantes o el alcohol ¡Aguas!
- Masticar y engullir de manera errónea
Cuando comes rápido y olvidas masticar adecuadamente, provocas que tu estómago trabaje de más para efectuar la digestión ¡Ayúdate tantito! ya que además de que tragas más aire y se generan más gases independientemente tipo de alimento, si comes de manera inadecuada, seguro tu digestión no será la mejor.
- Ansiedad o estrés
La salud mental juega un papel ¡Importantísimo! Ya que, si está desequilibrada, aunque no lo creas también afecta a nuestros hábitos alimentarios y al procesamiento que nuestro sistema puede realizar.
Pero ¡Calma! Hoy en día hay distintos remedios naturales y hábitos que puedes adoptar, para ayudarte a sobrellevar problemas digestivos, en seguida te los enlistamos:
La salud mental juega un papel ¡Importantísimo! Ya que, si está desequilibrada, aunque no lo creas también afecta a nuestros hábitos alimentarios y al procesamiento que nuestro sistema puede realizar.
Hoy en día hay distintos remedios naturales y hábitos que puedes adoptar, para ayudarte a sobrellevar problemas digestivos, en seguida te los enlistamos.
- Destina más tiempo a tus comidas ¡Disfrútalas! Verás como comiendo a tus horas, masticando correctamente y siendo más selectivo con tus alimentos, empezarás a notar la diferencia.
- Bebe mucha agua ¡A chorros! Ah no es cierto, no tanto, pero te recomendamos que sea de 1 a 3 litros diarios. Procura que no sea solamente en las comidas.
- Añade suplementos para echarle una ayudadita extra al cuidado de nuestra salud intestinal.
Inulina de agave, ¿Que qué es? Es un probiótico que estimula el crecimiento y desarrollo de las bacterias buenas del colón; además, contribuye a regenerar la flora intestinal ocasionando una función importante en el estómago y colón al momento de la digestión y puede ayudarte con malestares estomacales.
Así que ya sabes. Modifica un poco tus hábitos y dale un empujoncito a tu salud digestiva con probióticos. Si estás interesad@ en adquirirla puedes hacerlo dando clic acá.